La Fiscalía General del Estado recibió la denuncia por la desaparición de una joven de 20 años, con discapacidad intelectual. Luego de las investigaciones se conoció que Jefferson M. contactó a su víctima a través de Facebook, la enamoró y la llevó a vivir a su casa.
Con la ayuda de su hermano, Wilson M., y de dos dueños de unos prostíbulos, captó a la joven y –bajo amenazas y violencia física y psicológica– la obligó a ejercer el trabajo sexual, en ciudades como Las Lajas, Santa Rosa, Machala, Cuenca y Loja. En esta última fue rescatada y entregada a su madre.
En 2020, Fiscalía logró que Wilson M. y los dueños de los prostíbulos –donde ejercicio el trabajo sexual la víctima– sean sentenciados a veinticinco años con cuatro meses, como coautores del delito de trata de personas.
Por otro lado, los hechos sucedieron en 2019. El sujeto contactó a la joven en mayo, y la obligó a prostituirse hasta agosto de ese año. Estuvo prófugo de la justicia por casi tres años. Sin embargo, fue detenido en el cantón Arenillas, el pasado 22 de septiembre de 2022.
Por unanimidad, un Tribunal de Garantías Penales de El Oro, sentenció a Jefferson M. a 25 con cuatro meses, como autor directo del delito de trata de personas con fines de explotación sexual.
El testimonio anticipado de la víctima, las pericias de trabajo social y médico legal, los informes investigativos y la prueba documental figuran entre los elementos probatorios presentados por la Fiscalía en la audiencia de juzgamiento, con los cuales demostró la existencia del delito y la responsabilidad penal del ciudadano.